Resumen
Berserk: arco del espadachín negro
En este arco de la novela de “Berserk” se presenta al protagonista, un hombre alto y fornido, con una armadura y capa oscuras, portador de una gran espada; Este personaje con su trozo de acero afilado, se caracteriza por su fuerza descomunal y su gran destreza con las armas, quien posee además un brazo de acero equipado con una mini cañón y una ballesta.
Los personajes que expone presentan a Gunst y a Puck. El protagonista, Gunst, quien es un personaje frío, desencadena una ira magistral hacia los demonios de esta novel- aunque en este arco nunca se explica el por qué de ello-; por otro lado, se encuentra su pequeña compañera, Puck, quien es un elfo que Gunst salvó en un bar de mala muerte.
En este punto de la historia se observa a un antagonista, aparentemente, secundario: un rey tirano, reconocido como conde que antiguamente era sabio y misericordioso, pero que ahora, acusaba a personas de herejía, autorizando automáticamente su ejecución.
Sin embargo, Gunst no está interesado en salvar al reino o ayudar a la gente, sino que, simplemente, quiere matar a este conde demoníaco por el solo hecho de ser un demonio, emprendiendo así su travesía para asesinarlo.
Después de muchos acontecimientos logra llevar a este demonio -un ser completamente superior a él y casi inmortal- al borde de la muerte. No obstante, el demonio, desesperado por no morir y aprovechando que el protagonista estaba fuertemente herido, logra abrir un portal a una dimensión desconocida mostrando 5 figuras sombrías.
Lo anterior provoca, de forma automática, que el protagonista se concentre en una figura en específico determinado a matarlo. Aquí es donde se presenta el nombre de “Griffith” y el odio que le tiene Gunts hacia este.
A lo largo de todo este arco se evidencia una enigmática marca en el cuello de Gunts que frecuentemente sangraba. Se explica que Guns está marcado como un “sacrificio” haciendo que los demonios y espectros menores lo sigan tratando de acabar con su vida, indicando que entre más fuerte y malvado sea el demonio que esté cerca, más sangrará y dolerá.
Síntesis
En el el arco de “El espadachin negro” de Berserk nos presentan las bases de todo lo que vamos a ver a lo largo de toda la obra: un mundo colmado de desgracia, ira, demonios e injusticias, todo digno de una historia trágica. Se expone un mundo de fantasía oscura, con entes demoníacos fuera del plano de poder de cualquier hombre, y además al protagonista, un mercenario que busca venganza hacia un “dios demonio”. Se nos presenta a este dios demonio en una posición elevada, casi en un podio, encabezando al resto de demonios y siendo la figura predominante , y luego vemos al protagonista, derrumbado y apenas con vida tras enfrentarse a otro ser demoníaco que llegaba a ser un mero heraldo de estas entidades.
Presenciamos el profundo odio del protagonista con el gran dibujo del autor (Kentaro Miura)
transformado lo que era un trazo limpio, blanco y marcado a un trazo donde predomina el negro, la oscuridad, se vuelve erratico, con mucho movimiento, como si el odio saliera del protagonista, deformando su mirada y transformándola en una expresión enfocada únicamente en la ira.
Aparte nos plantean una incógnita clave, nos muestran cómo este dios demonio reconoce al protagonista y se extraña, ya que él lo había llamado por un “nombre” no por su título de “el halcon de la oscuridad” como era conocido entre los demonios. Vemos como Gunst grita con todas sus fuerzas el nombre de Griffith, mostrándonos una clara conexión entre estos 2 personajes, sabemos por intuición que Griffith hizo algo al protagonista y que este le guarda mucho resentimiento, pero no sabemos el qué y tampoco nos dan una idea clara, lo único que sabemos de esta relación es el odio que siente el protagonista, no podemos ver ningún otro sentimiento predominante en la obra excepto en una parte ya al final de la arco.
Ya con el protagonista fuera de la dimensión, donde se encontraba los demonios, lo vemos mal herido pero en pie. Se puede apreciar que una pequeña niña llora a su lado por haber presenciado cómo su padre (el conde) se transformaba en un demonio deforme y como la vida se le desgastaba, además la pequeña presenciaba como su madre era poseída por una lujuria demoníaca y cómo fue asesinada por su padre, haber presenciado el mismísimo infierno, pero renegando de que todo lo que había visto y preguntando entre llantos qué iba a hacer. Es entonces cuando el protagonista se posiciona a su lado y le dice “mátate”, ya que después de todo lo que había visto nada iba a mejorar, que si ella quería acabar con ese sufrimiento era mejor que tomara un pedazo de cristal para cortarse las venas, y es aquí donde se puede apreciar que una vez más la frialdad del protagonista, sin embargo sabemos que habla desde la experiencia, ya que él más que nadie sabe que llevar eso en la mente solo te va a llevar a la locura, pero tampoco tiene el afán de ayudar a la niña, vemos cómo la pequeña niña pasa del llanto al odio, culpando a Gunst por todo lo que había pasado, diciendo que si él no hubiera aparecido nada de eso hubiera pasado, decidiendo que no iba a matarse, pero que si iba a entrenar con la misión de matar a Gunst por todo lo que ella sufrió. Frente a ello, él la ve y lo entiende, emprende su camino dándole la espalda a la niña diciéndole que vaya cuando esté lista y es aquí donde podemos ver por primera vez una expresión de tristeza en el protagonista, casi apunto de romper en llanto, aunque a pesar de eso no nos explican muy bien el “por qué” .
La forma de representar emociones de Kentaro Miura es incomparable y la forma en la que juega con las incógnitas también. Nos presenta a un personaje rudo, que no le importan las personas débiles y no muestra compasión con nadie, vemos que el móvil de las acciones está sobre la base del odio y asumimos de forma inmediata la predicción de la historia: un protagonista severo e imponente con una compañera sentimental cuyo rol se funda en el contraste de personalidades, y además como recurso humorístico. Sin embargo luego nos destruye todo eso en una sola imagen, nos muestra al protagonista al borde del llanto, pero, ¿por qué? ¿Por qué una pequeña niña le dijo que lo iba a matar? ¿por el sufrimiento que le causó, o por algo más?
Es en este punto donde entendemos que la novela de Berserk tiene algo más que entregar, no solo es acción y sangre a través del recurso del arte, sino que además presenta un trasfondo que no podemos ver aún y para cuando nos damos cuenta, Kentaro Miura, ya plantea todo un mundo, una serie de incógnitas que rodean a lo ya antes visto, pero entonces… ¿Cuáles son las motivaciones de Gunts? ¿por qué ahora muestra sentimientos? ¿Quién es Griffith? ¿qué hizo? ¿Por qué Gunts quiere matarlo? y muchas preguntas más.
Presenciamos una trama que se hace cada vez más compleja, y sin darnos cuenta, nos atrapa en enigmas que queremos resolver, todo acompañado de un arte visual. En esta misma línea, se puede identificar que el estilo de dibujo de Kentaro es sin duda magnífico, expresivo, y muy completo. Tiene una gran capacidad de representación, mostrándonos estados de ánimo de forma indirecta en los personajes: cómo los personajes son consumidos por el odio, avaricia, lujuria, dándonos expresiones increíbles que favorecen la creación y desarrollo de una propia identidad para su obra. El estilo de los mangas siempre se mueve en blanco y negra, es característico de este formato, pero esto no es un impedimento para mostrarnos grandes paisajes o escenarios, y además sabe aprovecharlo muy bien para su obra. Lo anterior no solo se limita a su arte visual, ya que también su forma de plantear un mundo y expandirlo con distintas incógnitas es formidable. Respecto al nivel del guión, Berserk es de las mejores obras narrativas dado que entre más se lee, más se inserta la duda y curiosidad en el lector, plantea un mundo lleno de incógnitas y sub tramas interesantes, mientras se acompaña el gran guion con un dibujo incomparable.
Por ejemplo, en una sola imagen plantean una catástrofe, cómo es la infraestructura del reino y gente presenciando un tornado que está apunto de devorar el reino, pero a pesar de ser solo gente sin relevancia les da una pequeña identidad, hay mujeres, niños, abuelos y hombres, no es solo gente, es un “pueblo” compuesto por pueblerinos, amas de casa, comerciantes, soldados, todos expectantes a lo que va a suceder, dándose el tiempo de detallar la ciudad viendo cómo las casas de enfrente son de madera y mientras más se van acercando al reino va cambiando la infraestructura, pequeños detalles que Kentaro demuestra para darle vida a su mundo. Desde esta perspectiva el arte se puede entender como la “Forma específica de la conciencia social y de la actividad humana, consistente en un reflejo de la realidad a través de imágenes artísticas; forma uno de los procedimientos más importantes de la aprehensión estética del mundo.“ (Ecured, s.f.)
Este concepto se ve reflejado de forma abstracta en el dibujo de Kentaro Miura, mostrando el reflejo de las realidades de los sentimientos en los rostros de los personajes. También viéndolo aplicado en los ambientes y paisajes, como una planicie llena de paz o un valle inquietante abundante en suspenso y muerte. Kentaro miura demuestra un gran contraste en un dibujo fino y detallado, con un dibujo caótico y errático, jugado con las tonalidades y espacios entre el negro y el blanco, haciendo un dibujo casi como una llama incandescente de furia presente en el protagonista.
En la obra de Berserk en ningún momento se nos idealiza al protagonista. Cuando nos aparece el protagonista en algún lugar, automáticamente todo es lúgubre, es triste y es desolador, el lector sabe que va a ocurrir un desastre, ya que esta obra no es una simple novela, sino que también es una tragedia. Comparando esta obra con La Divina Comedia podemos ver cómo el protagonista va bajando en los infiernos de él mismo, reviviendo momentos y reencontrándose con su propio demonio; Griffith, nos deja claro que desde el momento que Guts emprendió su viaje, dejó su humanidad atrás, un humano normal no podría aguantar lo que resiste Guts, ni tampoco realizar la mitad de sus hazañas. Esto mismo nos queda claro en los diálogos de gente que ve al protagonista luchar, llamándolo “demonio” y preguntándole si realmente es un humano, esto podría ser una simple observación, pero hay que tener en cuenta que lo que hace Guts es asesinar demonios, ya que los aborrece y detesta, reafirmando la tragedia del héroe que no es reconocido por sus semejantes, sino que es despreciado como las bestias que él mismo odia.